Reino Unido avanza hacia la despenalización total del aborto post 24 semanas´
La Cámara de los Comunes del Reino Unido aprobó recientemente una controvertida enmienda que despenaliza el aborto más allá del límite legal de las 24 semanas de gestación, cuando hasta ahora solo se permitía en casos excepcionales, como peligro para la vida de la madre. Con 379 votos a favor y 317 en contra, la medida fue incorporada dentro de un proyecto de ley más amplio vinculado a temas de criminalidad.

La reforma, promovida bajo el argumento de evitar la criminalización de mujeres vulnerables, ha generado una fuerte reacción en sectores defensores de la vida, que denuncian que se trata de un paso más hacia la normalización del aborto sin límites y sin consecuencias, incluso en fases avanzadas del embarazo, donde el feto ya es plenamente viable fuera del útero.
Aunque los médicos y quienes participen activamente en interrupciones ilegales aún podrán ser procesados, la medida exime de responsabilidad penal a las mujeres que aborten después de las 24 semanas. Esta modificación legal llega tras una serie de casos judiciales que despertaron polémica mediática, donde algunas mujeres fueron procesadas por utilizar píldoras abortivas más allá del tiempo permitido, especialmente luego de los cambios introducidos durante la pandemia, que permitieron el uso de medicamentos en casa durante las primeras 10 semanas.

Uno de los casos más comentados fue el de Carla Foster, una mujer de 45 años que interrumpió un embarazo de ocho meses. Fue condenada inicialmente a más de dos años de prisión, pero su pena fue reducida por un tribunal de apelación, que señaló que el caso requería “compasión, no castigo”. Otro fallo reciente absolvió a Nicola Packer, quien tomó medicamentos abortivos estando embarazada de aproximadamente 26 semanas, alegando que desconocía su verdadero tiempo de gestación.
Desde los movimientos provida británicos advierten que estas decisiones están abriendo la puerta a una peligrosa permisividad legal. “Esto deja completamente indefensos a los bebés por nacer en etapas avanzadas, y expone a muchas mujeres a abusos y presiones para abortar”, sostuvo Alithea Williams, de la Sociedad para la Protección de los Niños No Nacidos. La organización considera que el marco legal actual está siendo desmantelado bajo argumentos emocionales, sin considerar el valor intrínseco de la vida desde la concepción.
Para muchos defensores de la vida, este giro legislativo representa una concesión a las presiones ideológicas de sectores que promueven el aborto como un derecho absoluto, sin restricciones. Afirman que lejos de proteger a las mujeres, se está institucionalizando el abandono estatal a embarazadas en situación de crisis, en lugar de ofrecerles alternativas humanas, médicas y sociales para continuar con su maternidad.
La medida todavía debe ser ratificada por la Cámara de los Lores. Aunque esta cámara no puede bloquear la legislación, sí podría retrasarla o plantear enmiendas.
Mientras tanto, organizaciones a favor de la vida y del derecho a nacer llaman a una mayor conciencia pública sobre las consecuencias de estas reformas. “No estamos ante un avance en los derechos, sino ante un retroceso en la protección de los más indefensos”, concluyó Williams.